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Diferencia entre espiritualidad y religión
Ellos, los misógenos clericales de todos los tiempos, nos prefieren y mantienen encorvadas.
¡Qué diferencia con Jesús !que nos endereza, nos empodera, nos seduce para su proyecto de liberar, sanar las mentes enfermadas por una institución más que vieja, obsoleta y con una minoría que pone todos los frenos ,y al final, la cosa echa humo.
¿Mi opción? Adherirme a Jesús, y trabajar para su proyecto. Sin mediadores controladores, sin egos disfrazados tanto si son seglares como ordenados, trabajando con la sencillez de la mujer encorvada que hoy ,casi de paso, nos cuenta Lucas que Jesús liberó enfrentándose de nuevo con el fariseísmo.
Tengo la impresión que seguimos, como colectivo, siendo sumisas al patriarcado que está en todo y que como espinas en un ojo hay que ir sacando, una a una, poco a poco pero con contundencia porque si se queda un trocito dentro, te estropea la visión. Y eso ocurre en países, en instituciones, en la iglesia….
Somos nosotras las que seguimos colaborando con una institución de la que si nos fuéramos quedarían dos telediarios.
Somos nosotras, las que como a marido adicto, limpiamos su vómito sin saber que haciendo esto, le damos el visto bueno a que siga. Así tantas de nosotras que no queremos enderezarnos porque al final así, protestando un poco alrededor de un café de amigas, como he hecho yo en el pasado, parece que lo arreglamos.
Y a lo largo de los siglos el pueblo oprimido por instituciones no sanas, que nuestra encorvada representa, sigue encorvado:
Ella no, ella se deja ver por El y El la llama y le dice :
MUJER, QUEDAS LIBRE
y LA TOCÓ IMPONIÉNDOLE LAS MANOS, Y ESA CARICIA LA ENDEREZÓ.
El punto es que ella se dejó ver, se dejó tocar y se dejó enderezar. A eso se le llama tener una espiritualidad encarnada, incorporada (en el cuerpo), que al final, es casi lo opuesto a la religión, según viene representada por unos señores que no usarán filacterias, pero que vemos en el sínodo, como en toda celebración en el vaticano, como van todos arregladitos con sus carísimos ropajes de un mismo color en honor a la estética. ¿Quién es esta señora? porque lo que hoy vemos es hambre y guerra, frío en una Europa y Oriente Medio en guerra como en la Edad Media, donde es imposible rezar diciendo Abba como la primera lectura de hoy y que no vengan a la mente los pequeñxs en los cayucos, moribundos, o las madres destrozadas con sus bebés muertos en brazos a causa de bombardeos causados por una herida no curada, un duelo no hecho, el holocausto, entre otras situaciones que todos sabemos.
Y como represalia, nos siguen prefiriendo encorvadas, porque aunque no puedan cambiar otras cosas, por lo menos en casa o en los templos que ellos controlan, tienen a alguien con quien desahogarse, y no puede ser.
¡Cómo no van a seguir dominando y explotando a la mujer si la religión más numerosa y poderosa del mundo y de la historia de todos los tiempos sigue haciéndolo! ¿Nos damos cuenta de que detrás de estos ¡No! al diaconado femenido y al sacerdocio por supuestísimo está un sí a lo vigente?, nos dan largas diciendo que seguirán estudiando el tema, y así nos quitan de delante.
Yo no quiero ni diaconados ni nada institucionalizado porque casi siempre viene con gusano, pero quiero, reclamo, igualdad para todas las mujeres del mundo. No reclamo superioridad, este problema lo tienen la mayoría de los varones y muchas mujeres, pero no todas.
Somos muchas y fuertes las que queremos igualdad y respeto. Punto. Con ilusión, con esfuerzo, con delicadeza: queremos Igualdad y Respeto.
Como dice la primera lectura de hoy “Los que se dejan llevar por el Espíritu de Dios (la Ruah) esos son hijos de Dios. Habéis recibido un espíritu de hijas que nos hace gritar “Abba” y si somos hijas somos herederas de Dios y coherederas con Cristo…( Romanos 8,15-17)
Y la iglesia oficial el día que nos pone esta primera lectura nos pone el evangelio de la encorvada, más claro agua. Es el Espíritu de Jesús, orante, quien endereza, libera…y así será si nosotras, orantes, realizamos su misión. Y, ellos ¿qué piensan o sienten al leer esta Palabra? La pregunta tal vez tendría que ser ¿piensan, sienten?
Ni digamos de las cifras que van saliendo de los abusos a pequeños y pequeñas…ha ocupado tema de comidas y encuentros, que siempre, como soy religiosa, acaban mirándome a mí para respuestas. ???
Veíamos en la resurrección de Lázaro como Jesús no entra en la casa donde hay representantes de la religión judía enemigos declarados de Jesús. El va directo a la tumba y ordena quitar losa y vendas, todo símbolo de la religión que oprime y le dice a aquel hombre muerto y atado por falta de vida de una institución mortífera que salga y que se vaya al Padre. No le devuelve a la casa, sino a la libertad del Abba, porque el discípulo y la discípula no mueren jamás, están en el Abba, no cómplices de una institución, la que sea que oprima.
Nos falta osadía para ser proféticas. Al final somos bastante miopes creyendo que cambiaremos algo…y se nos va la vida en reuniones y conclusiones y el pueblo, la gente busca alimento en baños de bosque y meditaciones de origen oriental porque nuestra religiosidad atada de pies y manos, y encorvada está en un momento, como el planeta, de sin retorno.
¿Quieres que te enderecen? yo creo que la mayoría en una encuesta sincera y secreta dirían que no porque no podemos controlar lo que veremos desde ese otro nivel, y ya estamos bien así, combinando un poco de todo, como en las dietas “comer un poco de todo” pero mucho de nada…
Jesús va a por todas, y nos invita a acompañarle, y mientras hay perfume bien, pero cuando se pone durillo…preferimos seguir con las reuniones de siempre, cómodas, acogedoras, y si hay bizcocho mejor, y mirar para otro lado porque total…
Esas religiosidades intoxicadas de poder son las que permiten esas guerras que hoy, como antes, destruyeron cientos de miles de vidas y de familias obligando de nuevo a un éxodo dolorosísimo y las personas siguen llegando, porque no tienen a donde ir.
¿Qué haría Jesús? ¿y las hijas e hijos de Dios? Te invito a decir Abba con el corazón y dejar que resuene, y tomar decisiones liberadoras.
Buena semana.
Carmen y Magda
Queridas hermanas, no se puede decir más alto y claro. Me uno a vuestra declaración. En el rito del bautismo somos constituidas por Cristo como profetas, reinas y sacerdotisas. Caminemos juntas, elevemos la mirada y sostenidas en Jesús, tomemos decisiones liberadoras. Un abrazo. Marisa. C. de Magdala
Me uno a ese seguimiento, a esa libertad que nos da el Espíritu, a ese ser profeta que va en nuestro ADN si nos dejamos tocar por Él. Gracias