San Carlos, Filipinas
Hace unos días la hermana Alma nos enviaba fotos de cómo bajaba el río debido a las fuertes lluvias, y nos comentaba lo felices que estaban ahora de poder almacenar agua con el nuevo sistema que les permite beber y regar de los depósitos construidos.
Nos comenta que lo que vemos en las botellas es el jugo de una de sus plantas fermentadas “bignay” que se usa para hacer jugo y mermeladas y también vinagre de zanahorias.
Cuando una granja encuentra la manera de guardar suficiente agua para la producción, así como para el abastecimiento de las personas que allí viven y trabajan, las posibilidades de cultivos se multiplican.
Estamos acabando el “Tiempo de la Creación” pero la tarea de continuar apoyando a quienes trabajan la tierra para dar de comer al hambriento y al sediento no se termina.
Nos piden que les digamos a los colaboradores que nos tienen siempre presentes en su oración de la tarde.