ermitas de Córdoba foto nuestra
Lo que es fundante en la Biblia ocurre en jardines: el de la Creación y el de la Resurrección. Y entre uno y otro hay un largo camino, … con flores y semillas, frutos y árboles, todo en un conjunto armonioso de belleza y de alimento que nos cuida en cada estación, con lo necesario para nuestra salud… acompañado de mucha comensalidad.
Es a lo largo de las comidas del camino donde alimentamos cuerpo y espíritu. Reconocemos diferentes culturas y sus maneras de nutrir su interioridad y sus cuerpos. Y es en esa complicidad de silencio y palabra donde surge la Paz, en nuestros jardines.
¿Comer o alimentarnos? no siempre coincide. Alimenta aquello que va más allá del cuerpo y que acogiéndolo nos introduce en la comensalidad.
Y el ayuno ¿Qué lugar ocupa en nuestra vida? La sabiduría del barbecho para la tierra y del ayuno para el cuerpo y espíritu.
Descubre más desde ESPIRITUALIDAD INTEGRADORA CRISTIANA
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Desde luego no es lo mismo comer que alimentarnos.
Ya dijo un médico sabio de la antigüedad » que tu medicina sea tu alimento».
Conocer nuestro cuerpo, conocer las propiedades de los alimentos….
Como en todas nuestras decisiones , lo que decidamos determinará nuestra vida.
La comida, la bebida, el descanso, el ayuno, el silencio, la oración….
Somos un todo complejo. No se puede separar el cuerpo del alma. Y todo repercute en el todo.
A nivel individual y a nivel global.