Este tiempo es solo una ocasión para remarcar lo que intentamos vivir durante todo el año pero de una manera especial. El hecho de que sea un esfuerzo ecuménico nos da la clave para entender que cuando se trata de una situación tan urgente como la que tenemos entre manos, las “banderitas” sobran; no se trata de si la iniciativa ha sido de tu iglesia o de la mía, no olvidemos que lo ecuménico une a las iglesias cristianas. Otras religiones y personas no afiliadas a una religión viven esta realidad con la misma y a veces con mucha más pasión y entrega que nosotras.
“El profeta Isaías (32:14) describe la Creación desolada sin paz debido a la falta de justicia y la relación rota entre Dios y la humanidad. Esta descripción de ciudades devastadas y tierras baldías enfatiza el hecho de que los comportamientos destructivos humanos tienen un impacto negativo en la Tierra.
Nuestra esperanza: La Creación encontrará la paz cuando se restaure la justicia.
Todavía hay esperanza y la expectativa de una Tierra en paz.
Esperar, en un contexto bíblico, no significa quedarse quieto y en silencio, sino actuar, orar, cambiar y reconciliarse con la Creación y el Creador en unidad, metanoia (arrepentimiento) y solidaridad.
El símbolo para 2025 es el
Jardín de la Paz
El símbolo se caracteriza por una paloma que lleva una rama de olivo que da vida al Jardín de la Paz.
En la historia bíblica del diluvio, la paloma juega el papel del mensajero: la paloma enviada por Noé regresa al arca con una rama de olivo fresca en el pico, señalando que el diluvio está retrocediendo.
Como la historia del diluvio comienza con una situación en la que la tierra está llena de violencia (Génesis 6:13), el regreso de la paloma con la rama de olivo llegó a ser conocido como una señal de nueva paz.” Tiempo de la Creación
Trabajemos por la paz, empezando por lo más pequeño, lo más sencillo, y siguiendo por aquello que está a nuestro alcance, aquello que “oímos” en nuestra oración personal, lo que la comunidad más cercana propone.
La paz es un trabajo personal y comunitario que rompe barreras, intereses creados, todo aquello que causa la guerra, que destruye y nos destruye. Hagámoslo de manera especial en este mes…y no nos cansemos de continuar; nuestros hermanos-as lo están pasando muy mal en muchas partes del mundo. La guerra nos empobrece a todos, nos deshumaniza a todos.
Carmen Notario, SFCC
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Si miramos hacia atrás en la historia humana vemos que siempre ha habido guerras, que siempre ha habido violencia.
Y si miramos dentro de un ser humano, en particular, vemos también una lucha entre dos fuerzas, la del egoísmo y la del altruismo.
Y vemos también que en los que han ido teniendo e poder , en general, ha vencido la fuerza del egoísmo.
De ahí las guerras y toda clase de injusticias.
Pero también es verdad que la inmensa mayoría de la gente sencilla no está de acuerdo con que se vulneren los derechos más elementales , no solo de los seres humanos, sino de todas las criaturas que pueblan este planeta.
¿Y qué podemos hacer para que llegue la justicia para todos que nos llevará a la ansiada paz?
La propuesta de vuestro artículo. Unirnos en oración, en meditación, mandando amor a todo el planeta con todas las personas de buena voluntad, y manifestarnos en gestos sencillos que todo el mundo vea , para que se abran los ojos y las conciencias . Y esto les lleve a los dirigentes a poner el foco en el bienestar de todos antes que en el enriquecimiento de unos pocos.
Gracias por el artículo.